Hace unos meses, escribía una columna sobre la importancia que para España tiene su “engarce” a la economía internacional. Por suerte, nuestro país ha pasado en el último medio siglo de ser un actor con escasas relaciones comerciales, para su relevancia, tamaño y posición geoeconómica, a ser uno de los más abiertos económicamente. Tanto las importaciones como las exportaciones tienen un peso relevante en nuestra economía, y eso se nota en nuestro bienestar.
Fuente: cincodias.elpais.com