En San Francisco, Los Ángeles, Phoenix, Austin o Atlanta ya no sorprende ver un coche y pensar: “No hay nadie al volante”. En todas estas ciudades opera un servicio de robotaxis —coches autónomos que admiten pasajeros comercialmente— de Waymo, la filial especializada en conducción autónoma de Alphabet, matriz de Google. El servicio se implantará pronto en otras dos ciudades, Washington y Miami. En ninguno de los vehículos hay conductor de seguridad.
Fuente: elpais.com