España ha vivido tres apagones este año. El eléctrico del 28 de abril. El que tuvo lugar el 7 de noviembre a las 17 horas, cuando Rosalía sacó el vídeo de Berghain. Y el 23 de febrero, cuando en el madrileño recinto Movistar Arena, Amaia logró que las 15.000 personas presentes permanecieran en silencio al comenzar a cantar Tengo un pensamiento. “Decidimos hacer las cosas al revés y comenzar la gira a lo grande. Estaba aterrada porque podía pasar cualquier cosa; estaba en un recinto inmenso mostrando a tantísima gente Si abro los ojos no es real, un disco lleno de canciones muy personales”, explica la cantante después de comer, inquieta por si tiene entre los dientes alguno traicionero trozo de comida. No los tiene. Filtros tampoco, pero sí una contagiosa ingenuidad y una naturalidad complicada de preservar siendo una mujer que con tan solo 26 años y tres álbumes a sus espaldas, ha revolucionado la historia de la televisión al sorprender en plena entrevista de La revuelta marcándose un directo en plano secuencia —inspirado en una entrevista en el telediario de Anne-Claire Coudray al cantante Stromae— con el que pasó del sofá a una calle aledaña a la Gran Vía junto a una banda y un coro. Curiosamente, cuando Rosalía protagonizó otro apagón (al final han sido cuatro) lo hizo también en el corazón de la capital, que paralizó y convirtió en la antesala de la presentación de Lux. “El disco de Rosalía se siente como algo histórico, la he admirado desde el principio”, dice la cantante, que es amiga de la catalana con la que comparte la virtuosa capacidad de cambiar las reglas del juego. “Para sorprender hay que tener la intención de hacerlo, pero lo que hagas tiene que ser sincero y ha de conectar de verdad contigo”.
Estilismo
Ángela Esteban-Librero
Maquillaje y peluquería
Vicent Guijarro
Manicura
Pannkks
Producción
Cristina Serrano
Producción local
Sample
Asistente de fotografía
Albert Rocafort
Asistente digital
Marc de Miguel
Asistente de estilismo
Lidia Lara
Fuente: elpais.com